Encinares de Añisclo

Recorrido a media ladera en torno al cauce del río Bellós transitando por unos encinares insertos dentro del dominio vegetal eurosiberiano propio del Pirineo.

Mapa

Información general

  • Término municipal: Fanlo
  • Población de referencia: Buerba
  • Punto de inicio: Acceso por carretera a Buerba
  • Punto de inicio (UTM): X: 750.601 Y: 4.714.077 Datum ETRS89 / Huso 30
  • Itinerario: Buerba - Ermita de la Virgen de Collarán - Gallisué - Buerba
  • Puntos de interés: Río Yesa; cañón de Añisclo; la Sardinera

MIDE

Horario 4 h 35 min
Desnivel de subida 500 m
Desnivel de bajada 500 m
Distancia horizontal 14,23 km
Tipo de recorrido circular
Condiciones de verano, tiempos estimados según criterio MIDE, sin paradas.

2 Severidad del medio
Hay más de un factor de riesgo
2 Orientación en el itinerario
Sendas o señalización que indican la continuidad
3 Dificutad en el desplazamiento
Marcha por sendas escalonadas o terrenos irregulares
3 Cantidad de esfuerzo
De 3 a 6 horas de marcha efectiva

Información cartográfica y descargas

Perfil
  • Mapa
  • Rutómetro
  • GPX

Detalle del recorrido

Desde Buerba se coge la carretera y se sigue hacia el sureste hasta el río Yesa el itinerario marcado como PR 44. Se deja pronto la carretera y se coge un tramo de pista para acceder a la ermita de Collarán. En este tramo la vegetación del entorno está dominado por el matorral y las zonas de pastizal pero se tienen buenas vistas hacia el sur de los hayedos puros o mixtos que caracterizan la cara noroeste de la Sierra de Santa Marina y los densos pinares que pueblan las laderas más norteñas de la Sierra de Bramapán por donde retorna la ruta.

Tras pasar la ermita el camino sigue muy marcado hacia el sureste con vistas al macizo de Bramapán que se sitúa al este de nuestro avance. El macizo de Bramapan está poblado por un denso encinar solamente interrumpido por franjas con una cobertura mayoritariamente arbustiva correspondientes a laderas más agrestes y pedregosas. En la parte superior del Macizo encontramos una masa mixta de encinar y matorral. Entorno al camino y conforme descendemos las laderas acaban cubriéndose de una alternancia de masas de pino silvestre y matorral con desiguales coberturas función del substrato y grado de erosión de las laderas.

Tras cruzar el río Yesa por un espectacular puente de piedra se sigue un tramo por el PR para abandonarlo poco después entorno a una cresta para descender por una senda empinada de nuevo al río Yesa, que se cruza en su confluencia con el barranco de San Chaime. En este tramo más fresco de la ruta la vegetación dominante es un denso pinar de silvestre. Tras cruzar el barranco y ascender por una estrecha senda se gana altura en las laderas más solaneras de valle que están pobladas por un denso encinar de no gran porte. Se asciende por senda hacia el nordeste y posteriormente norte hasta alcanzar una carretera.

Se sigue por la carretera a la derecha y se accede al núcleo abandonado de Gallisue. En el extremo oeste del grupo de casas del núcleo sale una senda hacia el norte por la que se sigue. Entorno al núcleo se extiende un pastizal y zonas de matorral pero se observa en las laderas norteñas densas masas de pino silvestre y en el resto de exposiciones domina principalmente encinares de portes moderados o medios.

La senda enseguida pasa a avanzar por entre laderas fuertemente empinadas donde domina el encinar pero que se ve interrumpido en las umbrías por masas de pino silvestre. La senda no ofrece pérdida al no haber otra alternativa. Desde la senda, aprovechando alguna apertura de la masa arbolada, se pueden contemplar los densos bosques con importante presencia de frondosas como hayas, fresnos, tilos, avellanos, etc. que caracterizan las laderas más umbrosas y frescas del fondo del cañón. En el resto de exposiciones de estas laderas como por la que avanzamos domina la encina.

En el extremo norte de la Sierra de Bramapán, coincidiendo con exposiciones más norteñas, se ve sustituido el encinar por un denso pinar de silvestre a menudo acompañado de bosquetes de temblón, hayas y otras frondosas. Poco antes de entrar en la cuenca del barranco de Arpió, que produce un brusco giro hacia el oeste del avance, sale un camino que desciende hacia el Cañón. Ya en la cuenca del barranco del Arpió tendremos impresionantes vistas de la accidentada geología del entorno donde destaca la extraordinaria verticalidad de los estratos que configuran el Tozal de San Miguel. El camino especialmente definido en el último tramo nos lleva finalmente hasta el entorno de inicio.

Galería fotográfica