iniciativas para su protección

  • Consumir productos el bosque que tengan certificado su aprovechamiento sostenible y que apoyen el desarrollo de las sociedades rurales. Es muy importante apoyar las iniciativas comarcales y locales de puesta en valor insitu de los recursos naturales de los bosques pues es la mejor manera de garantizar la gestión sostenible de nuestros bosques y su conservación. Los bosques mejor conservados y más aprovechados de Europa se encuentran en Suiza y Austria donde la transformación local de sus productos se aproxima a nivel de valle al 100% y donde la gestión ha incrementado la diversidad, la cobertura y la estabilidad de sus masas.
  • Respetar escrupulosamente las normas y órdenes anuales en materia de prevención frente a incendios forestales y velar y vigilar por el cumplimiento de las mismas por los demás informando en su caso al 112 de la localización de fuegos o el avistamiento de incumplimientos. Es muy importante concienciarnos y transmitir a nuestro entorno la necesidad de tomar todas las medidas preventivas que se recomiendan para evitar el inicio de un incendio de cuyas dimensiones finales a priori desconocidas pero que en épocas críticas puede ser dantescas. El incremento del peligro de las masas por la falta de gestión junto al agravamiento del clima por el cambio climático exigen un máximo respeto a las normas.
  • Apoyar campañas de asociaciones y las políticas encaminadas a la recuperación y repoblación de terrenos degradados y marginales. La suma de voluntades es capaz de repoblar extensas montañas si se planifican adecuadamente las actuaciones. Es importante que en estas actuaciones repobladoras nos asesoremos bien de la especie más interesante para recuperar la zona mirando que la plantación sea viable a largo plazo. Se debe tener en cuenta que se deben planificar los necesarios cuidados a mantener los años siguientes para garantizar la supervivencia de la repoblación. En casos será necesario proteger la plantación frente a los ganados y la fauna silvestre pues podrían llevar al traste nuestro esfuerzo. También debemos ser conscientes que en la naturaleza también deben coexistir terrenos abiertos u otro tipo de formaciones intermedias como matorrales o pastos que aportan biodiversidad y rompen la continuidad de nuestros masas arboladas.
  • Cumplir y velar por el cumplimiento estricto por los agentes intervinientes en la comercialización y transporte de productos madereros y los consumidores de madera de las normas para la prevención y erradicación de plagas evitando la dispersión de las mismas por el territorio. Los efectos de ciertos patógenos alóctonos, prácticamente inofensivos en sus ecosistemas originarios, pueden ser catastróficos para muchas de nuestras especies arbóreas.
  • Apuntarnos y colaborar con las iniciativas locales y comarcales de voluntariado ambiental y de protección de los montes frente a los incendios forestales pues es tarea de todos. En muchos casos nuestra función estará en un segundo plano en la lucha contra el incendio que en sus áreas más expuesta debe quedar bajo la responsabilidad de los cuerpos profesionales.

IMG05001_04