Pinus uncinata Mill.
Presentación de la especie
Su nombre específico deriva del adjetivo latín uncinatus, que significa «ganchudo» y alude a la forma de uña revuelta que presentan las escamas de sus piñas.
Estos son algunos de los otros nombres utilizados en la Península Ibérica para referirse al pino negro: Pino negro (Pirineo de Huesca). Pí negre (Pirineo catalán). Pino moro (Teruel). Si bien algunos dan por Pino moro a una especie híbrida entre el pino negro y el silvestre.
Características principales
El pino negro es un árbol que presenta en general una moderada altura y que raramente supera de los 15 a los 20 metros por las malas condiciones de estación donde generalmente vegeta por la pobreza y/o inestabilidad de los sustratos o los rigores climáticos de vientos, bajas temperaturas, etc. Tiene una copa con una forma típicamente cónica o piramidal que le permite evitar los daños por carga de nieve si bien en estaciones sometidas a fuertes vientos, presión de la nieve, etc la forma puede estar muy condicionada. Presenta un follaje muy denso y oscuro, como su tronco, de ahí su nombre, pino negro. Tiene tronco, en general muy rectos, columnares, derechos, salvo en situaciones particulares en zonas muy expuestas, al viento o a la acción de la nieve, etc.
Presenta hojas aciculares de color verde-oscuro y de corta longitud, como sus piñas, en relación a otros pinos. Como se ha dicho sus piñas tienen sus escamas con su apófisis recurvado hacia atrás, con forma de gancho que le diferencia de la piña del pino silvestre de parecido tamaño y forma.
Es un árbol de crecimiento lento que puede alcanzar edades de hasta 600 años.
Usos y curiosidades
Su madera es muy compacta, con un grano fino, que se trabaja con facilidad y que presenta una muy buena calidad, en algunos casos incluso superior a la de otros pinos, pero que se utiliza menos por su menor disponibilidad. Se utiliza en construcción, carpintería y como material combustible, aunque no se obtiene, de forma general, grandes piezas.
Es la especie española de referencia para repoblaciones forestales en alta montaña donde presenta un papel protector e incluso colonizador. Es una especie con un gran valor estético, por la forma piramidal y la rigidez de su copa de intenso color verde oscuro que contrasta con el roquedo y la tasca alpina en nuestros valles pirenaicos.