pino carrasco

Pinus halepensis. Mill

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Presentación de la especie
El nombre científico del pino hace referencia al conocimiento de su existencia desde la Antigüedad en la ciudad de Aleppo (Siria).
Otros nombres utilizados en la Península Ibérica para referirse a este pino son: Pino de Alepo, Pino carrasqueño, Pincarrasco. Pi bord (Cataluña y Valencia). Pi blanc, Pi nas (Cataluña). Pino blanquillo (Cazorla y Segura) Pizarro, Pinasa, Pino blanco,

Características principales
Es un árbol mediano, que en buenas condiciones puede alcanzar entre los 15 y 20 metros de altura. El tronco es generalmente más o menos tortuoso, aunque puede ofrecer fustes derechos en buenas condiciones. La corteza es blanquecina en la juventud, con la edad se engrosa y se agrieta volviéndose oscura y pardo rojiza. La copa se torna lobulada e irregular desde temprana edad, en torno a 20 años . Generalmente es clara, por lo que da poca sombra.
Las acículas normalmente aparecen envainadas de dos en dos. Son finas y flexibles, de longitud larga de entre 6 y 12 centímetros, tienen un color verde claro y persisten en el árbol poco más de dos años. Florece de Marzo a Mayo y las piñas alargadas de entre 6 a 12 centímetros están maduras al final del segundo verano. Es muy característico y distintivo de la especie la persistencia de las piñas en el árbol durante varios años, aún abiertas.

Usos y curiosidades
El pino carrasco tiene un crecimiento longitudinal relativamente rápido. Su longevidad es reducida, no soliendo vivir más de 150 a 180 años.
La madera es muy clara, de grano fino, semipesada, muy resinosa y algo densa. Se utiliza para calefacción, cajerío y como traviesas de ferrocarril, sin embargo, no es muy utilizada en carpintería debido a sus malas características y a  la dificultad de tener fustes rectos de dimensiones aprovechables.
Es la especie de pinar que más se resina en épocas de gran demanda después del pino pinaster, el pino resinero por excelencia.
En el aspecto ornamental y socio-recreativo juega un papel muy importante, y como especie protector, su valor es relevante ya que constituye la única especie arbórea capaz de colonizar y restaurar las laderas más áridas de nuestra provincia en los Monegros.